Contra la privatización del sistema público de pensiones y por los derechos sociales

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El crack de 2008 provocado por la voracidad especulativa del capital financiero cuyos beneficios millonarios estaban asegurados en paraísos fiscales, produjo en España la crisis del ladrillo y la banca. Este escenario, permitió al lobby financiero a través de la Comisión Europea neoliberal, el FMI y el Banco Mundial secuestrar la soberanía nacional mediante la imposición de reformas laborales, de pensiones y de la propia Constitución, para asegurarse que el dinero que los sucesivos gobiernos regalaban a los bancos y empresas españolas, lo pagara la ciudadanía del país. Y así llegaron las reformas de Pensiones y Laborales, que fueron impuestas sin apenas resistencia social, ni oposición, de quien tenía que representar a la ciudadanía trabajadora.

Las consecuencias de estas reformas, son visibles actualmente en el mundo laboral, ya que ha propiciado contratos precarios, desmantelado la negociación colectiva (lo que hace vulnerables las posiciones de los y las trabajadoras, permite los destajos que estaban prohibidos, como el caso de las Kellys, agricultura y subcontratas) y se han desregulado los ERE, usados por empresas con grandes beneficios y sin revoluciones tecnológicas, para despedir trabajadores y trabajadoras mayores de 50 años y sustituirlos por personal joven con contratos temporales, a bajo costo y largas jornadas de trabajo como sucede en la banca actualmente. Todo ello pagado con el dinero de los propios trabajadores y trabajadoras. Por lo que se refiere a las pensiones, ahora son de menor cuantía y de más difícil acceso, mientras que los recursos de la Seguridad Social (dinero que los y las trabajadoras ingresamos en la caja de las pensiones) se han empleado en gastos que le son ajenos con el objetivo de su desmantelamiento. Se han realizados dos reformas que prolongaron la edad de jubilación, desvalorizaron las pensiones por debajo del IPC, aumentaron los años de cotización necesarios, penalizaron la jubilación anticipada en largas carreras de cotización, impusieron el factor de sostenibilidad que deja en manos de los gobiernos el importe de las futuras pensiones incumpliendo la propia Ley General de la S.S.

Desde 2008 ha crecido la pobreza y la brecha económica, los ricos son más ricos a costa lógicamente del aumento de ciudadanos y ciudadanas en pobreza severa aun teniendo trabajo, siendo especialmente grave sobre mujeres y menores. Hemos cambiado la justicia por la caridad, pero ha emergido una creciente movilización social a partir del 11M, que no está dispuesta a seguir permitiendo que nos arrebaten más derechos.

Ahora, con el pretexto de la epidemia de la COVID quieren dar un nuevo empuje en el saqueo de los recursos públicos, en particular las pensiones. Así han planteado un millonario plan de recuperación para las grandes empresas para su adaptación ecológica y de telecomunicaciones. Pero su financiación no será a cargo de quienes se han lucrado ensuciando el planeta o monopolizando las comunicaciones, sino a cargo de deuda del estado. Y para pagar esta deuda se pone de condición que se privatice uno de los pocos activos públicos que quedan: las pensiones. Creen que pueden repetir impunemente lo que hicieron después del 2008.

Bajo un supuesto Acuerdo Social, cuyo contenido real desconocen los trabajadores, pretenden iniciar la privatización de los ingresos de la Seguridad Social y desviar hacia fondos buitre nuestras cotizaciones. Se encubre esa jugada regulando que por 5 años se revaloricen las pensiones, pero en realidad esto ya lo habíamos conseguido en la calle. Su propósito es saquear las arcas del estado y desmovilizar el movimiento pensionista intentando justificar que ahora sí que van a arreglar el problema. No es la primera vez que en sanidad, educación o trabajo cada vez que hacen una reforma el resultado para la gente es que las cosas empeoran.

Pero los pensionistas, los movimientos sociales y parte del movimiento sindical no vamos a aceptar este anzuelo y hemos iniciado un proceso de información y movilización. Frente a quienes justifican esas reformas, exigimos que se auditen las cuentas de la seguridad social, porque la propaganda de que es insolvente es simplemente falsa e interesada para justificar los cambios. Ya 7 fuerza políticas del Parlamento y centenares de ayuntamientos han dado apoyo a esta exigencia.

Además, frente la pretensión de imponer sus reformas, exigimos revertir las anteriores reformas de pensiones y laborales para garantizar una pensión digna para todo el mundo por encima de los 1080€ tal como establece la carta social europea, acabar con la brecha de género de las pensiones y volver a la jubilación a los 65 años. Por todo ello vamos a volver como hace 2 años a Madrid este 16 de Octubre. Llamamos a que la población se sume a un proceso de movilización que no hemos abandonado y que tendrá continuidad en los próximos meses, hasta revertir los intentos de privatización y degradación del sistema público de pensiones que desde el sector financiero se quiere imponer en toda Europa. Este es un problema del conjunto de la ciudadanía y por ello las organizaciones firmantes llamamos a pensionistas, trabajadores y jóvenes a movilizarnos solidariamente en esta jornada y a abrir un proceso de debate sobre las pensiones en los centros de trabajo y estudio de todo el país.

GOBIERNE QUIEN GOBIERNE LO PÚBLICO Y LAS PENSIONES SE DEFIENDEN


Este 16 de outubro a Madrid

Contra a privatización do sistema público de pensións e polos dereitos sociais

O crac de 2008, provocado pola voracidade especulativa do capital financeiro, cuxos beneficios millonarios estaban asegurados en paraísos fiscais, produciu en España a crise do ladrillo e a banca. Este escenario permitiu ao lobby financeiro, a través da Comisión Europea neoliberal, o FMI e o Banco Mundial, secuestrar a soberanía nacional mediante a imposición de reformas laborais, das pensións e da propia Constitución, para asegurarse que os cartos que os sucesivos gobernos regalaban aos bancos e empresas españolas os pagase a cidadanía do país. E así chegaron as reformas de pensións e laborais, que foron impostas sen apenas resistencia social nin oposición de quen tiña que representar á cidadanía traballadora.

As consecuencias destas reformas son visibles actualmente no mundo laboral, xa que propiciaron contratos precarios, desmantelando a negociación colectiva (o que fai vulnerables as posicións dos traballadores e das traballadoras, permite o traballo arreo, que estaba prohibido, como no caso das Kellys, agricultura e subcontratas) e se desregularon os ERE, usados por empresas con grandes beneficios e sen revolucións tecnolóxicas, para despedir traballadores e traballadoras maiores de 50 anos e substituílos por persoal novo con contratos temporais, a baixo custo e en longas xornadas de traballo, como sucede na banca actualmente. Todo isto pagado cos cartos dos propios traballadores e traballadoras. Polo que se refire ás pensións, agora son de menor contía e de máis difícil acceso, mentres que os recursos da Seguridade Social (cartos que os traballadores e as traballadoras ingresamos na caixa das pensións) empregáronse en gastos que non lles corresponden co obxectivo do seu desmantelamento. Realizáronse dúas reformas que atrasaron a idade de xubilación, desvalorizaron as pensións por debaixo do IPC, aumentaron os anos de cotización necesarios, penalizaron a xubilación anticipada en largas carreiras de cotización, e impuxeron o factor de sostibilidade, que deixa nas mans dos gobernos o importe das futuras pensións, incumprindo a propia Lei Xeral da S.S.

Desde 2008 creceron a pobreza e a brecha económica, os ricos son máis ricos a expensas loxicamente do aumento de cidadáns e cidadás en pobreza severa pese a ter traballo, sendo especialmente grave para  mulleres e menores. Cambiamos a xustiza pola caridade, pero xurdiu unha crecente mobilización social a partir do 11M que non está disposta a seguir permitindo que nos arrebaten máis dereitos.

Agora, co pretexto da epidemia da COVID, queren dar un novo pulo no saqueo dos recursos públicos, en particular as pensións. Así idearon un millonario plan de recuperación dirixido ás grandes empresas para a súa adaptación ecolóxica e de telecomunicacións. Pero o seu financiamento non correrá a cargo de quen se lucrou ensuciando o planeta ou monopolizando as comunicacións, senón da débeda do Estado. E para pagar esta débeda ponse a condición de que se privatice un dos poucos activos públicos que quedan: as pensións. Cren que poden repetir impunemente o que fixeron despois do 2008.

Baixo un suposto Acordo Social, cuxo contido real descoñecen os traballadores, pretenden iniciar a privatización dos ingresos da Seguridade Social e desviar a fondos voitres as nosas cotizacións. Encóbrese esta xogada regulando que por cinco anos se revaloricen as pensións, pero en realidade isto xa o conseguíramos na rúa. O seu propósito é saquear as arcas do Estado e desmobilizar o movemento pensionista intentando xustificar que agora si que van a arranxar o problema. Non é a primeira vez que fan unha reforma en sanidade, educación ou traballo e o resultado para a xente é que as cousas empeoran.

Pero os pensionistas, os movementos sociais e parte do movemento sindical non imos tragar ese anzol e iniciamos un proceso de información e mobilización. Fronte a quen xustifica estas reformas, exiximos que se faga unha auditoría das contas da Seguridade Social, porque a propaganda de que é insolvente é simplemente falsa e interesada, para xustificar os cambios. Sete forzas políticas do Parlamento e centenares de concellos xa apoiaron esta exixencia.

Ademais, fronte á pretensión de impoñer as súas reformas, exiximos reverter as anteriores reformas de pensións e laborais para garantir unha pensión digna para todo o mundo por encima dos 1080€, tal e como establece a carta social europea, acabar coa brecha de xénero das pensións e volver á xubilación aos 65 anos. Por todo isto imos volver a Madrid, como hai dous anos, este 16 de outubro. Chamamos a que a poboación se sume a un proceso de mobilización que non abandonamos e que terá continuidade nos próximos meses, ata reverter os intentos de privatización e degradación do sistema público de pensións que, dende o sector financeiro, quérese impoñer en toda Europa. Este é un problema do conxunto da cidadanía e por iso as organizacións asinantes chamamos a pensionistas, traballadores e mocidade a mobilizarnos solidariamente nesta xornada e a abrir un proceso de debate sobre as pensións nos centros de traballo e estudo de todo o país.

GOBERNE QUEN GOBERNEO PÚBLICO E AS PENSIÓNS DEFÉNDENSE


Urriaren 16an, Madrilera

Pentsioen sistema publikoaren pribatizazioaren aurka eta eskubide sozialen alde.

Espainian adreiluaren eta bankuaren krisia, mozkinak paradisu fiskaletan aseguratuta zeuzkan eta espekulazio gosea zuen 2008ko crack-ak sortu zuen . Agertoki horri esker, lobby finantzarioak, Europako Batzorde neoliberalaren, NMFren eta Munduko Bankuaren bidez, subiranotasun nazionala bahitu ahal izan zuen, lan-erreformak, pentsioak eta Konstituzioa bera ezarriz, hurrengo gobernuek Espainiako banku eta enpresei oparitzen dieten dirua herrialdeko herritarrek ordain zezaten. Eta horrela iritsi ziren pentsioen eta lan-kontratuen erreformak, ia gizarte-erresistentziarik eta aurkakotasunik gabe inposatuak, herritar langileak ordezkatu behar zituenak.

Erreforma horien ondorioak nabariak dira gaur egun lan-munduan; izan ere, kontratu prekarioak eragin ditu, negoziazio kolektiboa eraitsi du (eta horrek ahuldu egiten ditu langileen jarrerak, debekaturik zeuden laneratzeak ahalbidetzen ditu, hala nola Kellyak, nekazaritza eta azpikontratak), eta EEE horiek desarautu egin dira, etekin handiko eta iraultza teknologikorik gabeko enpresek erabiliak, aldi baterako langileak eta langileak kaleratzeko. Hori guztia langileen diruarekin ordainduta. Pentsioei dagokienez, orain kopuru txikiagokoak eta eskuragarriagoak dira, eta Gizarte Segurantzako baliabideak (langileok pentsioen kutxan sartzen dugun dirua), berriz, desegiteko erabili dituen gastuetarako erabili dira. Bi erreforma egin dira, erretiro-adina luzatu, pentsioak KPItik behera jaitsi, beharrezko kotizazio-urteak gehitu, kotizazio-karrera luzeetan erretiro aurreratua zigortu, eta etorkizuneko pentsioen zenbatekoa gobernuen esku uzten duen jasangarritasun-faktorea ezarri dute, Gizarte Segurantzaren Lege Orokorra bera bete gabe.

2008az geroztik, handitu egin da pobrezia eta eten ekonomikoa; aberatsak aberatsagoak dira, noski, pobrezia larrian dauden herritarren kopuruaren hazkundearen kontura, nahiz eta lana izan, bereziki larria baita emakumeen eta adingabeen kasuetan. Justiziaren ordez, karitatea aukeratu omen dugu, nahiz eta gero eta gizarte-mobilizazio handiagoa sortu den M-11tik aurrera, ez gaudelako prest eskubide gehiago galtzeko.

Orain, COVIDaren izurritearen aitzakiarekin, beste bultzada bat eman nahi dute baliabide publikoen arpilaketan, bereziki pentsioetan. Hala, enpresa handientzako berreskuratze-plan aberats bat proposatu dute, ekologiaren eta telekomunikazioen aldetik egokitzeko. Baina haien finantziazioa ez da planeta zikindu edo komunikazioak monopolizatu dituztenen kontura izango, estatuaren zorraren kontura baizik. Eta zor hori ordaintzeko baldintza da geratzen diren aktibo publiko bakarretako bat pribatizatzea: pentsioak. Uste dute 2008. urtetik aurrera egindakoa errepikatu dezaketela, zigorrik gabe.

Langileek ezagutzen ez duten Gizarte Akordio baten bidez, Gizarte Segurantzaren diru-sarrerak pribatizatzen hasi eta gure kotizazioak funtsetara bideratu nahi dira. Jokaldi hori 5 urtez pentsioen balioa handitzea erregulatuz estaltzen da, baina hori kalean lortu genuen. Honen asmoa estatuaren diru-kutxak arakatzea eta pentsiodunen mugimendua desmobilizatzea da, arazoa konponduko dutela justifikatzen saiatuz. Ez da lehen aldia: osasun, hezkuntza edo lanean erreformaren bat egiten duten bakoitzean, jendearentzat egoera okertzea dakar.

Baina pentsiodunok, gizarte-mugimenduok eta mugimendu sindikalaren zati batek ez dugu amu hori onartuko, eta informazio- eta mobilizazio-prozesuari ekin diogu. Erreforma horiek justifikatzen dituztenen aurrean, gizarte-segurantzaren kontuak ikuskatzeko eskatzen dugu, kaudimengabea dela dioen propaganda faltsua eta aldaketak justifikatzeko interesatua besterik ez delako. Dagoeneko 7 indar politiko eta ehunka udal batu dira eskakizun honetan.

Gainera, bere erreformak ezartzeko asmoari dagokionez, pentsioen eta lanekoen aurreko erreformak itzultzea eskatzen dugu, mundu guztiarentzat 1080 €-tik gorako pentsio duina bermatzeko, Europako gizarte-gutunean ezartzen den bezala, pentsioen genero-aldea desagerrarazteko eta 65 urterekin erretirora itzultzeko. Horregatik guztiagatik, duela 2 urte bezala, Madrilera itzuliko gara urriaren 16an. Herritarrak mobilizazio-prozesura atxikitzeko deialdia egiten dugu. Prozesu hau ez da alde batera utziko eta hurrengo hilabeteetan jarraituko du, Europa osoan finantza-sektoreak ezarri nahi duen pentsio-sistema publikoaren pribatizazio- eta degradazio-saioak aldatu arte. Herritar guztien arazoa da hau, eta horregatik, erakunde sinatzaileok pentsiodunei, langileei eta gazteei dei egiten diegu jardunaldi honetan elkartasunez mobilizatu daitezen eta estatu osoko lantokietako pentsioei buruzko eztabaida-prozesu bat ireki dezaten. PENTSIOAK ETA PUBLIKOA DEFENDATU BEHAR DIRA GOBERNUAN EDOZEIN BADAGO ERE


Aquest 16 d’Octubre a Madrid

Contra la privatització del sistema públic de pensions i pels drets socials

El crack de 2008 provocat per la voracitat especulativa del capital financer els beneficis milionaris del qual estaven assegurats en paradisos fiscals, va produir a Espanya la crisi del maó i la banca. Aquest escenari, va permetre al lobby financer a través de la Comissió Europea neoliberal, l’FMI i el Banc Mundial segrestar la sobirania nacional mitjançant la imposició de reformes laborals, de pensions i de la pròpia Constitució, per a assegurar-se que els diners que els successius governs regalaven als bancs i empreses espanyoles, els pagués la ciutadania del país. I així van arribar les reformes de Pensions i Laborals, que van ser imposades sense gairebé resistència social, ni oposició, de qui havia de representar a la ciutadania treballadora.

Les conseqüències d’aquestes reformes, són visibles actualment en el món laboral, ja que han propiciat contractes precaris, desmantellat la negociació col·lectiva (el que fa vulnerables les posicions dels i les treballadores, permet la feina a preu fet que estava prohibida, com el cas de les Kellys, agricultura i subcontractes) i s’han desregulat els ERO, usats per empreses amb grans beneficis i sense revolucions tecnològiques, per acomiadar treballadors i treballadores majors de 50 anys i substituir-los per personal jove amb contractes temporals, a baix cost i llargues jornades de treball com succeeix a la banca actualment. Tot això pagat amb els diners dels propis treballadors i treballadores. Pel que fa a les pensions, ara són de menor quantia i de més difícil accés, mentre que els recursos de la Seguretat Social (diners que els i les treballadores ingressem a la caixa de les pensions) s’han emprat en despeses que són alienes amb l’objectiu del seu desmantellament. S’han realitzats dues reformes que van prolongar l’edat de jubilació, van desvaloritzar les pensions per sota de l’IPC, van augmentar els anys de cotització necessaris, van penalitzar la jubilació anticipada en llargues carreres de cotització, van imposar el factor de sostenibilitat que deixa en mans dels governs l’import de les futures pensions incomplint la pròpia Llei General de la S. S.

Des de 2008 ha crescut la pobresa i la bretxa econòmica, els rics són més rics a costa lògicament de l’augment de ciutadans i ciutadanes en pobresa severa fins i tot tenint feina, sent especialment greu sobre dones i menors. Hem canviat la justícia per la caritat, però ha emergit una creixent mobilització social a partir del 11M, que no està disposada a continuar permetent que ens arrabassin més drets.

Ara, amb el pretext de l’epidèmia de la COVID volen donar una nova embranzida en el saqueig dels recursos públics, en particular les pensions. Així han plantejat un milionari pla de recuperació per a les grans empreses per a la seva adaptació ecològica i de telecomunicacions. Però el seu finançament no serà a càrrec dels qui s’han lucrat embrutant el planeta o monopolitzant les comunicacions, sinó a càrrec de deute de l’estat. I per pagar aquest deute es posa de condició que es privatitzi un dels pocs actius públics que queden: les pensions. Creuen que poden repetir impunement el que van fer després del 2008.

Sota un suposat Acord Social, el contingut real del qual desconeixen els treballadors, pretenen iniciar la privatització dels ingressos de la Seguretat Social i desviar cap a fons voltors les nostres cotitzacions. S’encobreix aquesta jugada regulant que per 5 anys es revalorin les pensions, però en realitat això ja ho havíem aconseguit al carrer. El seu propòsit és saquejar les arques de l’estat i desmobilitzar el moviment pensionista intentant justificar que ara sí que arreglaran el problema. No és la primera vegada que en sanitat, educació o treball cada vegada que fan una reforma el resultat per a la gent és que les coses empitjoren.

Però els pensionistes, els moviments socials i part del moviment sindical no acceptarem aquest esquer i hem iniciat un procés d’informació i mobilització. Enfront dels qui justifiquen aquestes reformes, exigim que s’auditin els comptes de la seguretat social, perquè la propaganda que és insolvent és simplement falsa i interessada per a justificar els canvis. De moment set forces polítiques del Parlament i centenars d’ajuntaments han donat suport a aquesta exigència.

A més, front a la pretensió d’imposar les seves reformes, exigim revertir les anteriors reformes de pensions i laborals per a garantir una pensió digna per a tothom per sobre dels 1080€ tal com estableix la carta social europea, acabar amb la bretxa de gènere de les pensions i tornar a la jubilació als 65 anys. Per tot això tornarem com fa 2 anys a Madrid aquest 16 d’Octubre. Cridem a la població perquè es sumi a un procés de mobilització que no hem abandonat i que tindrà continuïtat en els pròxims mesos, fins a revertir els intents de privatització i degradació del sistema públic de pensions que des del sector financer es vol imposar en tota Europa. Aquest és un problema del conjunt de la ciutadania i per això les organitzacions signants fem una crida a pensionistes, treballadors i joves a mobilitzar-nos solidàriament en aquesta jornada i a obrir un procés de debat sobre les pensions als centres de treball i estudi de tot el país.

GOVERNI QUI GOVERNI ALLÒ PÚBLICI LES PENSIONS ES DEFENSEN

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