Si bien la fundación alemana Heinrich Böll tiene
                afinidad política con el Partido Verde, sus acciones
                contradicen las reivindicaciones públicas de dicho
                partido, ya que esta recurre desde años a la
                subcontratación y al trabajo temporal. Así, los
                trabajadores afectados reciben menos dinero del que
                recibirían si trabajaran bajo una contratación directa
                y, por ende, la plantilla queda dividida. Tras haberse
                afiliado al sindicato FAU de Berlín, los/as
                compañeros/as fueron despedidos/as. Convocamos a una
                semana de acciones internacionales contra la
                subcontratación y la hostilidad de la fundación Heinrich
                Böll hacia la actividad sindical.
Desde hace unos años, en Alemania se hace uso de la
                subcontratación y especialmente del trabajo temporal
                para ejercer presión sobre los/as trabajadores/as,
                eludir sus derechos, y bajar los salarios y
                remuneraciones. En público, tanto el partido Verde como
                la fundación Heinrich Böll critican la precarización
                progresiva de las relaciones laborales y, en la presente
                campaña electoral, exigen un salario mínimo de 8,50
                euros por hora. Sin embargo, desde hace años la
                fundación Heinrich Böll saca provecho de la
                subcontratación para tareas de limpieza, catering y
                gestión de conferencias y, de esta manera, promueve el
                empleo precario. Como si fuera poco, hay trabajadores/as
                afectados/as que ni siquiera ganan el salario mínimo
                exigido.
Debido a que los/as compañeros/as se afiliaron a la FAU
                de Berlín y en mayo hicieron público este escándalo,
                desde agosto ya no trabajan en la fundación Heinrich
                Böll dado que esta ha decidido que otra compañía
                subcontratada haga el trabajo. Normalmente, un despido
                de este tipo no sería posible en Alemania pero, gracias
                a la subcontratación, la fundación Heinrich Böll no
                tiene problemas en hacerlo: quien se opone queda afuera.
                Consideramos que la fundación Heinrich Böll lleva a cabo
                una clara política antisindicalista y exigimos la
                reincorporación de los/as compañeros/as, con un contrato
                fijo y un salario según el convenio vigente.
Por eso, del 2 al 9 de septiembre, convocamos a una
                semana de acciones internacionales. La fundación
                Heinrich Böll tiene oficinas en muchas ciudades fuera de
                Alemania, entre otras, Bruselas, Praga, Varsovia,
                Zagreb, Sarajevo, Belgrado, Kiev y Moscú (http://boell.org/web/364.html).
                ¡Exijamos a la gerencia de la fundación Heinrich Böll
                que reincorpore a todos/as los/as compañeros/as! El 5 de
                septiembre, en el Juzgado Laboral de Berlín, tendrá
                lugar el juicio de un compañero que exige un contrato
                fijo. La fundación Heinrich Böll tendrá que abandonar la
                política de subcontratación ¡y por fin contratar a
                nuestro compañero y pagarle un salario según el
                convenio!





 
							



