Empatía

ZONA LUMBAR | Meme de CNT | Extraído del cnt nº 428.

Recientemente, el Banco de España ha publicado un informe titulado «Los efectos del Salario Mínimo Interprofesional en el empleo: nueva evidencia para España» de la serie «Documentos Ocasionales».

A partir del 1 de enero de 2019, el SMI se incrementó un 22,3% pasando de 736 euros mensuales a los 900 euros, en ambos casos con 14 pagas. Este aumento originó una amalgama de titulares sobre sus posibles efectos en el empleo. En dicho informe, el Banco de España destaca que el impacto de la subida del SMI se concentró en el colectivo de trabajadores con bajos salarios mermando la creación de empleos, no tanto en la destrucción de los ya existentes. Atribuir la reducción de empleos a la subida del SMI es un brindis al sol que tiene mucho de panfletada ideológica y poco de informe técnico.

En 2019, el Gobernador del Banco de España recibió una retribución bruta que superó los 180.000 euros, sin contar los complementos personales que le puedan corresponder. Ahí entran unos cuantos salarios mínimos interprofesionales.

Atribuir la reducción de empleos a la subida del SMI es un brindis al sol que tiene mucho de panfletada ideológica y poco de informe técnico.

Al siguiente día de la publicación del informe, repasando las páginas digitales de algunos medios locales de comunicación, me topo con el titular de que el equipo de fútbol «X» ofrece al jugador «Y» 2 años de contrato y 2,5 millones de euros por campaña. Aunque, en principio, no tenga nada que ver, me resulta imposible no acordarme del informe del Banco de España. En esa cifra caben muchos salarios mínimos interprofesionales.

Dejo volar la imaginación y, abriendo el abanico para la ironía, me pregunto si el impacto que tiene en el empleo la circunstancia de que muchas personas puedan acceder a un SMI es reseñable, de manera «negativa», en un informe y no el hecho de que pocas personas puedan alcanzar una retribución equivalente a una cuantiosa cantidad de salarios mínimos interprofesionales.

¿Son aspectos comparables? Desde la perspectiva de un teórico en Economía ni lo sé, ni me importa; solo me preocupa el descaro con el que se fija la diana de la responsabilidad en las capas más vulnerables de la población como si la precariedad sociolaboral brotase de forma espontánea, cual amapola, y, de esta manera, centrar la culpabilidad en quienes sufren la desventaja de unas condiciones desiguales a la hora de enfrentarse a la búsqueda de una vida digna. La empatía es la característica previa, necesaria e imprescindible para desenterrar la solidaridad.

RSS
Follow by Email
WhatsApp