Se viene produciendo desde 2012 un incremento preocupante de contrataciones falsas en ayuntamientos bajo la figura legal llamada COLABORACIÓN SOCIAL.
Mediante esta triquiñuela, los ayuntamientos OBLIGAN a parados a trabajar 6 horas diarias bajo la amenaza de los servicios regionales de empleo de que en caso de negarse, pueden perder hasta 3 meses de prestación.
Estas formas de «contratación» hacen efectiva la máxima de que toda prestación debe generar una obligación al perceptor de esa prestación.